Concurso
Emplazamiento Promotor Autores Clara Murado, Juan Elvira, Enrique Krahe
Realización
Emplazamiento
Promotor
Autores
Clara Murado, Juan Elvira, Enrique Krahe
Objeto del encargo
La residencia de estudiantes Teknobyen en Trondheim (Noruega) es el resultado de una propuesta ganadora de EUROPAN 9 realizada por Clara Murado, Juan Elvira y Enrique Krahe (MEK Arquitectos).
Desde la convocatoria de EUROPAN hasta la finalización del edificio, el pasado verano, un amplio conjunto de actores nacionales e internacionales -EUROPAN, Sit (promtor), NCC (constructora), Murado+Elvira+Krahe (MEK arquitectos), Link Arkitektur (estudio asociado), el Ayuntamiento de Trondheim, EUROPAN Noruega, NTNU (Universidad), asociaciones vecinales y otros promotores privados-, han tomado parte activa en el desarrollo del proyecto, en un proceso complejo y lleno de desafíos. Esta comunidad profesional global se ha beneficiado de un contexto compartido y múltiple para dar respuesta a los intereses específicos de la comunidad local. De este modo, profesionales de distintas culturas y formaciones han cooperado en la creación de nuevas formas de innovación.
Todos estos agentes han hecho alguna aportación relevante, en una negociación continua que ha tenido como resultado un edificio en estrecha relación con la ciudad de Trondheim.
El proyecto trata de unificar situaciones de total intimidad con las ocasiones de extroversión y colaboración propias de una residencia de estudiantes. El volumen del edificio asume la compleja situación urbana existente, sin perder por ello autonomía, para extraer potencial de su entorno y de unas condiciones climáticas y de soleamiento muy específicas. El desarrollo del proyecto ha tratado de preservar una idea fundamental: el fortalecimiento de los lazos entre todos los que compongan la comunidad de residentes, animándolos a crear sus propias reglas, responsabilidades compartidas y modos inesperados de equilibrar sus intereses personales.
Los estudiantes comparten un espacio único formado por un gran cuarto de estar común y una súper-cocina autogestionada. Este condensador social es un espacio experimental para el uso y disfrute simultáneo de 116 personas.
Nuestra intención ha sido emplear el programa de necesidades como la herramienta de diseño clave para transformar el modo de vida de los estudiantes, en especial su manera de relacionarse con sus compañeros de ‘familia’. Más allá de ser un objeto aislado y autorreferencial, la residencia Teknobyen es un edificio que entabla un diálogo con la ciudad y sus códigos, y se centra en la creación de una experiencia colectiva y un sentido de responsabilidad social.
La residencia Teknobyen hace énfasis en la innovación social, económica y medioambiental mediante la creación de un modo de vida renovado para los estudiantes, un colectivo clave en la ecología social de nuestros días, en el que maximizar los lazos interpersonales en el interior de una arquitectura, si bien modesta, comprometida.